
El pasado domingo día 13 de diciembre, las juveniles y senior nos enfrentamos al mayor de nuestros rivales; Arroyo.
Hacía bastante tiempo que sabíamos el día del encuentro, y que jugabamos en su pueblo.
El partido contra las juveniles fué de máxima tensión, ya que, si ganábamos podríamos ser, probablemente, campeonas de Extremadura. Vamos, que era una posible semifinal.
En el primer set se adelantaron ellas, pero en el segundo nosotras fuimos claramente superiores y demostramos que sabemos jugar muy bien, y le ganamos.
El tercero se volvió a torcer, y ahora ellas iban por delante nuestra, pero nosotras no nos rendíamos y en el cuarto set, volvímos a ganarlas; ya ivamos empate, 2-2. Esto suponía llegar al quinto set, el cual era sólo hasta 15 puntos, y ahí gana el que empiece cogiendo ventaja.
Nosotras sabíamos perfectamente lo que teníamos que hacer; empezar desde el principio a ganarlas y coger la mayor ventaja posible.
Empezamos bien, pero a mediados del set, empezaron a acercarse y estabamos muy igualadas.
Cuando estaba terminando el set, nosotras nos adelantamos cantando "último", pero la suerte no estaba de nuestro lado, y después de estar mucho tiempo tan igualadas, nos ganaron.
Esta vez no estamos desilusionadas, porque sólo con saber que las costó muchísimo ganarnos y que estuvimos tan igualadas, nos aníma mucho.
Así que la vuelta va a estar mucho más reñida, ya que jugamos en nuestro pueblo, y eso siempre te da más confianza para ganar.
Se me olvida conmentar que Laura Tena sí pudo jugar este partido, pero no estaba al cien por cien, ya que su lesión es bastante complicada. Esperemos que para la vuelta se recupere del todo, porque es nuestra capitana y una pieza esencial en el equipo.
Contra el equipo seniors, empezamos perdiendo 2-0 en set, pero rápidamente nos espabilamos y conseguimos remontarlas quedando 3-2; ganando así el partido.